Cargue un sentimiento dentro de donde no pude sentir su leve cuerpo, Me senté al pie de las piedras esperando recibir un reflejo del mar, la amarre a mi cuerpo en una noche bohemia, y la tristeza una vez mas enluto a la luna, la hizo desdichada, los sonidos se hicieron abrumadores, mientras cerraba nuevamente los ojos esperando el amanecer.
Tenía tantas preguntas en el bolsillo, tantas incógnitas que sabiamente inferí; nunca serian respondidas, pero creía y eso me hacia humano, los remordimientos de este nuevo sentimiento me hacen desdichadamente frío.
No hubo necesidad de tocarte para adivinar que esa piel blanca era tan suave como la tentación, que esos ojos tan sinceros y brillantes como el firmamento estrellado al limite del mundo eran el espejo de esa virtud , mujer.
Quise sentir tus manos sin haberlas tocado, tenía miedo hasta de conocerte y saber que te idealice demasiado, tenía miedo de mi realidad.
Escuchaba solo tu voz y hasta imaginaba tus lagrimas en mi regazo, jugando yo con tu cabello mientras te veía levantar el rostro murmurando al cielo un beso prohibido.
Sabes, estoy seguro que leerás esto y entenderás que no solo es atracción, que también estoy amándote, sintiéndote sin haberte tocado, murmurando también un beso al viento desvanecido, perdido y sin dirección.
Que no me importa nada que haya pasado antes de ese momento en el que te conocí, esa noche en el que tu vestido liberaba tus piernas, donde se que me miraste, donde ahora puedo tener inspiración.